3 de junio de 2010

Yo también tengo miedo.

"Ella decía: Ya no dejaré de mirarte. Te miraré sin parar.
Y, después de una pausa: Tengo miedo cuando mis ojos parpadean. Miedo de que, durante ese segundo en que mi mirada desaparece, se deslice en tu lugar una serpiente, una rata, otro hombre.

Él intentaba incorporarse un poco para tocarla con los labios.
Ella movía la cabeza: No, quiero únicamente mirarte.

Y luego: Dejaré la lámpara encedida toda la noche. Todas las noches."

1 comentario:

  1. Me he releído esta parte del libro, unas veinte veces y soy incapaz de leerlo sin emocionarme, sin llorar.

    ResponderEliminar